8 de diciembre de 2010

Mi tercera semana de prácticas. Necesidades Educativas Especiales.


Compañer@s como ya os comenté durante este periodo de prácticas voy a poder observar y tratar con un alumno con necesidades educativas especiales. Este niño tiene problemas motores, del lenguaje y cognitivos.
Este alumno cronológicamente tiene tres años, pero a nivel madurativo es como si fuese un bebé en la etapa de exploración de todo aquello que lo rodea. Para poder moverse por el aula necesita la ayuda de su andador o de una persona adulta, por ello casi siempre está la cuidadora del centro en nuestra aula.
El alumno realiza casi siempre las mismas actividades que el resto de sus compañeros, pero como está claro él se limita a hacer garabateos descontrolados en la ficha porque es la etapa en qué se encuentra.
Para qué poco a poco vaya evolucionando, cada día la especialista de pedagogía terapéutica (P.T.) está una hora en el aula con él. Nunca se va fuera del aula para trabajar lo mismo que los demás, para que se sienta integrado y así sus compañeros lo ven como uno más del grupo, solo que necesita un poco más de cuidado.
Tan solo sale del aula una hora en la semana con la A.L. (audición y lenguaje).
Durante los recreos siempre hay un maestro al cargo del alumno porque aunque puede desplazarse con su andador este quiere andar y descubrir como cualquier otro de los alumnos, tan solo que necesita de alguien.

Esto son los cuidados que necesita este alumno pero lo que realmente quiero destacar es que de estos alumnos son de los que te llevas grandes sorpresas y alegrías, y es que antes le tenías que llevar de la mano y ahora aunque parezca increíble con sujetarle un poco del babi por detrás el anda solo e incluso va dando sus primeros pasitos solo.
Cada progreso que se hace es una alegría y ganas de seguir hacia delante porque lo valoras mucho más.
Siempre se ha dicho que estos niños son muy cariñosos, esto es cierto, y es que desde el primer día se abrazó a mí y no me extrañó y rechazó. Además algunos maestros ya me han dicho que aunque llevo poco tiempo con él me tiene gran cariño y yo a él, como no. Me llama y reclama mi atención en algunas ocasiones con una sonrisa en la cara.

Para finalizar quería reflejar y deciros que nosotros podemos aprender mucho de los niños con necesidades educativas especiales ya que siempre tienen una sonrisa en la cara y eso que cada día tienen que enfrentarse a muchos más obstáculos que nosotros. Siempre están contentos y alegres, gracias a él regreso a casa cada día con esa misma sonrisa en la cara.
Divertíos y al igual que nuestros alumnos aprenden muchas cosas de nosotras, aprended de vuestros pequeños sabios.

Lo siento por alargarme tanto.
Un saludo.

2 comentarios:

  1. Me parece muy interesante que hayas tenido esa oportunidad en tu aula. Aprovéchala y aprende todo lo que puedas de todos los niños pero en especial de ese con necesidades educativas especiales, he intenta poner algo de él en cada una de las experiencias, pues desde aquí, a mí también me gustaría seguir sus avances.
    Un saludo.

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  2. Una de las mayores alegrías de un maestro se produce cuando alguno de sus niños consigue un logro, y si además se trata de uno con necesidades educativas especiales, ésta es aún mayor. Como docentes, debemos actuar para hacer que nuestros alumnos se desarrollen al máximo, y si poco a poco lo vamos consiguiendo la satisfacción es plena.

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